22.8°C
Despejado
COLUMNISTA
4 de octubre de 2016
Hoy les escribo a través de las escrituras de mis alumnos, esas que les permitieron sacar desde adentro todo lo que tenían guardado.
Por: Ely Grimaldi
Llevo tiempo queriendo escribir sobre este tema porque yo creo que todos, alguna vez, hemos sido objetos de algún tipo de burla ya sea física o psicológica. Gordo, enano, feo, cuatro ojos, etc. Forman parte de una gran lista que habitualmente mucha gente tiene incorporado en su vocabulario.
Siempre hay que tener en cuenta que el problema no es de la persona que es agredida sino que el problema es de la persona que emite la burla, eso no quiere decir que a la persona no le duela ser victima del otro, la persona va a ser agredida siempre y cuando le de importancia a las palabras del otro. Muchas veces sucede que la persona se burla del otro para llamar la atención, sentirse superior, pero no es así, porque lo único que logra es lastimar a los demás. Generalmente cuando suceden este tipo de cosas es porque el humano en el fondo no es felíz, “una persona que es felíz no necesita burlarse de nadie”, “Aquel que de burlas vive, solo refleja su inseguridad e impotencia”. Creo que la mayoría de los ciudadanos sabemos lo que es la burla porque hemos visto como la provocan o porque fuimos victimas o porque sin darnos cuenta, alguna vez la produjimos y nos burlamos del otro sin mala intención.
¿Alguien sabe realmente
lo que es la burla?.
La burla, es un comentario o gesto que tiene la finalidad de ridiculizar a una persona o una situación. Muchas veces la burla pretende humillar al otro, se trata de una cuestión condenable y peligrosa. Un individuo puede convertirse en el centro de burlas, por su religión, vestimenta, su aspecto físico, sexualidad, etc. Y esto no es agradable para nadie. La misión fundamental será buscar el ridículo de esa persona, por diversión o por el simple hecho de hacerla sentir mal, por eso, de alguna manera quien burla siente un profundo placer al hacerlo y por lo tanto disfrutará sobremanera cuando consiga que la persona a la que se burla se sienta incómoda y molesta.
Lamentablemente el exceso de las burlas son provocadas a los niños/as en las escuelas, no hay peor situación que ver a un niño siendo molestado por sus propios compañeros constantemente y sentir como se convierten en victimas del bullying, esto se los digo por experiencia. Frecuentemente cuando un niño es agredido en la escuela lo primero que piensa es no concurrir mas, porque sabe que al próximo día lo espera más humillación y la verdad que cansa, sobretodo te desanima de seguir con tu vida, tus sueños, proyectos, te hiere y es muy triste.
Todos los días me pregunto, ¿Qué les pasará por la cabeza a la persona que burla?, hay que tener en claro que el problema no es de la persona que es victima de una burla sino de la persona que emite la burla, y vos me podes contestar: “pero la persona que es insultada también tiene un problema porque esta siendo agredida” ¡Error!
El que provoca la burla lo hace para hacerse el gracioso delante de otras personas y ser el centro de atención y sentirse “superman” logrando poner mal a la gente sin ninguna necesidad.
Los que burlan son personas, (mejor dicho “somos” porque yo también me he burlado de alguien alguna que otra vez), que necesitan destacar las “fallas” de los demás porque en el fondo no se quieren ni se valoran (la palabra fallas la pongo entre comillas para decirlo de una forma, porque no son fallas, son cualidades o virtudes que la persona tiene, porque no todos somos iguales, cada cuál es como es y eso es lo perfecto).
Confieso que yo también me he burlado, pero no para sentirme superior ni nada de eso, sino que ha sido con dolor, porque a mi las burlas me dolían y mucho y era mi forma de contestarles, de defenderme, en vez de ponerme a llorar sola. Yo soy una de esas tantas chicas que en la escuela hemos sufrido la burla (y era cosa de todos los días) pero con el tiempo lo superé, sin darles importancia, preocupándome en ser yo misma y obviamente con el apoyo de mi familia.
Creo que el apoyo de los padres es lo principal para un niño, tener a alguien a quien contarle que les pasa, alguien para ser escuchado, aconsejados; que estén presentes, protejan. Es lindo escuchar de sus bocas decir “puedes manejarlo, te vamos ayudar” sin juzgarnos, sin criticarnos. Eso hace bien al corazón y además te ayuda a vivir el día a día.
Si hay algo que le duele a la persona que provoca la burla es ser ignorado, que es lo peor que le podes hacer, demostrarle que para vos es invisible.
Para terminar voy a darles mi punto de vista, yo siempre he sido una persona que ha tenido complejos y lo he pasado francamente mal, especialmente por burlas sobre la estatura. No lo voy a negar pero cuando me di cuenta que no podía seguir así empecé a sentir lastima de las personas que se burlaban, por ejemplo de mi estatura y aprendí que no me afectara lo que me dijeran..
Por eso todos podemos ayudar a los niños o jóvenes a entender que las burlas no se pueden prevenir y que no se puede manejar los dichos de las personas; sin embargo, sí se puede aprender a controlar las propias respuestas y reacciones, lo cual hará que la burla sea más manejable.
Por ultimo les dejo una frase muy cortita y tan verdadera y creo que nos hace a todos reflexionar por un segundo, “Vive y deja vivir”.
Los saludo con afecto, Yo, Maira Gonzalía, humanamente HUMANA-
Mis alumnos… esos seres que por aprender, me enseñaron tanto...
Seguinos
5492241474214