“La tarea no será sencilla porque vivimos en una Provincia empobrecida, mal administrada por gobernadores que no supieron defender los intereses provinciales, que apostaron a ser prudentes y complacientes con el poder central, condenando a la provincia a la decadencia, que se hace visible en el deterioro de la Educación, la carencia en los hospitales públicos, y el deterioro de la infraestructura que ya afecta el desarrollo regional”.
Preguntado de cómo veía a Lezama afirmó: “No me canso de valorar la gesta por la Autonomía de Lezama. Fue un ejemplo de inteligencia de la dirigencia para coincidir en un objetivo, la dirigencia partidaria, y otros dirigentes emergentes unidos, el pueblo luchando a la par de sus dirigentes, y una vez lograda la autonomía, la situación requería que el primer gobierno local sea un gobierno de coalición, que integre a los diversos sectores, que de alguna manera la unión lograda se viera reflejada, y continúe la lucha y se replanteen nuevos desafíos. Pero esto no ocurrió. Creo que, en este sentido, el primer Intendente no honró, ni valoró adecuadamente la gesta".
Afirmó además: “También me sorprendió la designación de muchos empleados en un Municipio que no presta servicios muy diversos por la presencia de una Cooperativa que alivia y facilita su funcionamiento. Con tantos empleados los sueldos terminan siendo muy bajos, afectando al municipal de carrera. Pareciera existir una decisión de achatar, de igualar para abajo.
La oposición deberá unirse y generar una alternativa que permita construir un nuevo sueño. Los Lezamenses deben decidir qué ciudad quieren, como lograr su Desarrollo, como generar mas y mejores posibilidades de progreso. Tienen que volver a soñar en grande, y trabajar duro para conseguirlo. Ya demostraron una vez que eran capaces de llegar a lo que parecía una quimera.”