“Mientras tengamos la materia prima que son los peces, podamos mejorar lo que ofrecemos y hagamos una buena difusión, Lezama va a contar a corto plazo con una muy buena realidad turística”, resumió Roberto Palacios.

La actividad se despliega y va alcanzando resultados muy halagadores para los actores  involucrados. Los pescadores, de aquí y de allá, encuentran en nuestra zona múltiples opciones para practicar la actividad: un rosario de lagunas de fácil acceso por ruta o caminos de tierra y el río Salado, imponente, en tres escenarios bien diversos. Embarcados o desde las orillas, con los más desarrollados equipos o con una discreta caña de fabricación casera, llegan a los espejos de agua y esperan pacientes el pique que dibuja la sonrisa en los más chicos y se transforma en desafío para los adultos. 
Pero también está la Dirección de Turismo y su labor, la Asociación de Pescadores Deportivos de Lezama y sus inquietudes, los comerciantes locales y cada uno de los vecinos que debe sentirse orgulloso por la intensa actividad que se advierte en el rubro. 
Lezama fue lleno total durante el último finde largo y ha mantenido ese perfil desde el feriado de Semana Santa.
El Destino, La Postrera, Guerrero, Barrancas, Chis Chis, La Salada, La Tablilla y las Encadenadas han sido testigos del impacto del miniturismo que - para los lezamenses- es sinónimo de pesca. El presidente de la Asociación de Pescadores Deportivos, Roberto Palacios, es uno de los gratamente sorprendidos por esta realidad. “Creo que es totalmente positivo para nosotros que nos vengan a visitar, que conozcan los lugares”, destacó a El Espejo. “Se está trabajando fuertemente en lo que es la difusión de la actividad, pero también en el control e ir viendo cómo se  pueden mejorar los lugares para que se aprovechen de mejor manera.”

¿Cuál es el perfil del pescador que viene a estos lugares? 
RP: En los últimos años ha ido cambiando, creo que por ahí se ha hecho más floreciente la pesca embarcada, tener la posibilidad de contar con embarcaciones y movilidad ha hecho que por ahí el tipo de gente que ha empezado a venir en los últimos años sea diferente. De todos modos es variado, hay gente que viene y acampa, se queda un par de días, como están los que vienen y hacen el turismo de fin de semana y feriados. 
Germán González, encargado de control lacustre, ¿Cómo has visto la utilización de estos espacios el fin de semana?

GG: Muy concurridos todos los lugares cercanos a la ruta y a partir del viernes se pudo ver más gente en los caminos de tierra para llegar al pesquero de Laguna Barrancas, o al puente Santa María que se ha hecho un lugar muy lindo, que le gusta a la gente.

RP: El jueves pasé por El Destino a la mañana temprano y era una ciudad, estaba toda la ruta  en la bajada llena, autos estacionados arriba, gente pescando hacia las dos márgenes,  e incluso sobre el lado derecho porque se empezó a utilizar la rivera que pertenece a Pila. 

¿Cuál es tu labor específica?
GG: Cumplo una función en la Dirección de Turismo que consiste en recorrer los pesqueros, viendo las necesidades y el control sobre las lagunas con respecto a las redes, trasmayos, mediomundos, espineles, tratando de controlar y reglamentar la pesca, en cuanto a cantidades, tamaños, y demás. En realidad fueron muchos años de pesca furtiva y hoy gracias a Dios desde el municipio, con la Dirección de Turismo y la patrulla rural se está haciendo un trabajo interesante. 

¿Qué especies están sacando?
GG: En nuestras lagunas el pejerrey es lo más típico, después están las variedades en lagunas de bagre, carpa, está reflotando la pesca de tararira y en el Rio Salado también pueden salir carpas más grandes, patí, bagres de mar. La cercanía a la desembocadura del río hace que entren peces de mar. Es bueno el pique, eso sumado al trabajo de control que están difundiendo la Dirección de Turismo y la Asociación de Pescadores a través de facebook ha tenido muy buena repercusión con comentarios, visitas, y demás. Todo eso hace que el turismo vuelva a creer en Lezama.

Ese control desalienta la llegada de malintencionados… ¿Verdad?
RP: Sí, el trabajo de la patrulla rural es excelente, acompañando con acciones las recorridas en las que Germán lleva a cabo los controles, desde retirar redes hasta averiguar antecedentes. Se valora mucho desde afuera el trabajo que se está haciendo acá, gente de Chascomús,  Castelli y la zona nos alienta y desean poder en algún momento hacer algo parecido porque tienen la misma problemática. Desde la asociación siempre estamos tratando de aportar ideas de sumarnos, de acompañar, y sobre todo de lograr mejoras. 

Algo muy destacable que se ha logrado es el trabajo mancomunado del estado municipal y la asociación civil, con excelentes resultados…
RP: Creo que el camino es ese tratar de trabajar todos juntos por el mismo objetivo. Nos llena de orgullo la devolución permanente que recibimos de la gente. Nos acompañan programas de pesca a nivel nacional, que dicen lo que se está haciendo y difunden lo que organizamos. En la zona hemos dado la nota y estamos con proyectos. Trabajamos mucho en conjunto con la dirección de turismo, y se ha visto en este año que llevamos que se ha mejorado. Logramos que se instalara un pesquero en Barrancas, es importantísimo, en lugares que eran por ahí utilizados como tierra de nadie hoy por hoy estamos intentando fijar presencia. Creo que eso nos va a favorecer y a futuro mucho más.

¿Se están sembrando las lagunas?
GG: Sí, lo hacemos desde la Dirección de Turismo a través de la Estación Hidrobiológica de Chascomús que nos llama y nos entrega. La última vez sembramos en Barrancas 80 mil larvas e hicimos una suelta de alrededor de 300 ejemplares de 12 cm en la primera prueba que se hizo de cría de pejerrey en jaula. Siempre hay una pérdida importante igual. Se sembró también en Chis Chis y en La Tablilla, importante. Para mí significó además poder ejercer el curso que había hecho en la estación para siembra de especies.

Nota completa en edición impresa de SEMANARIO EL ESPEJO del martes 6 de mayo de 2014