Se acerca la temporada de verano y, en tiempos de preparativos, es esencial tener en cuenta el estado y la documentación del vehículo. Los expertos en seguridad vial recomiendan además conocer el recorrido que se va a realizar, para identificar zonas peligrosas.

La Costa Atlántica es el lugar más elegido por las y los argentinos durante los meses de diciembre, enero y febrero, con un aumento significativo del tránsito en las rutas.Las velocidades máximas van de 60 a 130 km/h en las rutas 2, 11, 63 y 74, en donde hay más de 70cinemómetros (conocidos como radares) que controlan el exceso de velocidad. Por eso, hay que tener en cuenta los 48 radares instalados en la ruta provincial N° 2 (mano ascendente y descendente); los 11 de la ruta provincial N° 11; los 2 en la ruta N° 36; los 5 de la ruta N° 63; y los 6 cinemómetros colocados en la ruta N° 74.

“Cada radar está instalado en lo que se denominan ‘puntos negros’, que son los tramos en donde se han producido mayor cantidad de siniestros viales y donde se debe aminorar la velocidad como prevención. Es decir, que es esencial que atendamos adónde se encuentran para tener mayor precaución en esas zonas de la ruta”, explicó el vocero del Observatorio de CECAITRA, la Cámara que nuclea a empresas productoras de software vial, Facundo Jaime, y agregó que “es imprescindible que, en los días previos a salir a la ruta, nos tomemos el tiempo necesario para reunir la documentación, los elementos obligatorios y chequear el estado del vehículo”. 

La ley de tránsito nacional 24.449, plantea los requisitos para circular: “Que su conductor esté habilitado para conducir ese tipo de vehículo y que lleve consigo la licencia correspondiente; que porte la cédula, de identificación del mismo; que lleve el comprobante de seguro, en vigencia, el cual podrá ser exhibido en formato papel impreso o digital a través de dispositivos electrónicos. Cabe señalar que el conductor también deberá circular con su DNI y con la Revisión Técnica Vehicular (RTO) o la Verificación Técnica Vehicular (VTV) o similar, según la provincia en donde este radicado el vehículo”. Y expresa, además, que el vehículo debe poseer “matafuego y balizas portátiles normalizados, excepto las motocicletas”; y contar con “correajes y cabezales normalizados o dispositivos que los reemplacen”.