En Lezama contamos con una Protectora de Animales que lleva funcionando ya varios años y verdaderamente  lo hace a pulmón, por amor a los animales. Hace un tiempo a esta parte nos juntamos con miembros de la Asociación, quienes  estaban en ese tiempo construyendo el refugio ubicado en el predio de la UPA Trauma, los mismos integrantes de “Patas Sucias” eran quienes ponían la mano de obra, dado que no contaban con los medios ni el personal necesario, y había (y hay) urgencia por contar con un lugar para ubicar a los animales que la Protectora rescata de distintas situaciones, ya sea porque son peligrosos, o porque simplemente han sido abandonados por sus dueños. 
En la actualidad, ese refugio no sólo está sin terminar, apenas si comenzó  la obra,  sino que además, no hay miras de que la construcción continúa, almenos pro el momento, teniendo en cuenta las respuestas que la gente de la protectora cuenta que les ha dado el Intendente Harispe. 
La Ordenanza aprobada en el mes de octubre del año 2017, que habla de “Tenencia Responsable” no solo no se cumple en ninguno de sus artículos, la sociedad la desconoce por completo, y nadie se preocupa en que se conozca, si esa Ordenanza se cumpliera, o se hiciera cumplir, para los miembros de la Protectora, “se solucionarían  todos los problemas que hoy en día tenemos.” 
Para conocer la situación actual de Patas Sucias El Espejo se reunió con los integrantes de la nueva comisión para dar a conocer su trabajo diario y silencioso. 
Tienen familias, empleos, o estudian, tienen obligaciones,  pero a pesar de eso, dedican  mucho tiempo y esfuerzo para solucionar problemas que nos atañen a todos y lo hacen por amor a los animales, desinteresadamente y nosotros no les damos el reconocimiento que merecen.

¿Cuántos hace que se fundó la Protectora?
La protectora lleva funcionando siete años, cinco de ellos ya con personería jurídica. La comisión consta de 12 integrantes. Con el correr de los años la protectora ha ido cambiando, en cuanto a comisión, este año somos muchos más compañeros, hay mucha armonía, cosa que no pasaba en otras comisiones anteriores. En un principio, las promotoras fuimos Carola (Borges), Amalia (Granados) y yo (Soledad Travieso), y en ese primer momento había muchísimas personas, pero cuando hay que ponerse a trabajar quedan pocas. 
Nos pasaba que nunca llegábamos a formar la asociación por falta de integrantes, este año eso no pasó y la armamos “de una”. Creo que estamos más unidas y todas tiramos para el mismo lado, algo que no pasaba antes y en ocasiones quedábamos tres, presidenta, vice y secretaria. Las cosas cambiaron y todas tiramos para el mismo lado y queremos las mismas cosas. 

¿Qué sucedió con la construcción del refugio municipal?
Hay una ordenanza que fue aprobada el año pasado, la número 28 y dice “Créese el refugio Municipal”. El primer destino para este refugio era en el campo hípico, pero fueron varios los motivos que nos dieron cuando decidieron cambiarnos de lugar. Nos dijeron que el lugar donde nos enviaban era mejor, que el campo hípico en un futuro se iba a trasladar a Monasterio y que eso sería un barrio nuevo y también que los caballos en época de doma podían romper el sitio porque descansaban donde estaríamos nosotros. Habíamos parquizado ese lugar, trabajamos con los chicos del grupo envión,  hubo hermosas jornadas de trabajo,   plantamos árboles que habíamos comprado y otros nos habían donado los vecinos, todo eso se perdió. 

¿Adónde los trasladaron entonces?
Nos derivaron al predio de la UPA Trauma, en ese lugar la comisión anterior, ante las ganas de tener un refugio,  y tal vez  en una decisión desacertada, por la desesperación de tener  más de sesenta perros con los que no sabíamos que hacer, compró 30 mil pesos en materiales.  A la hora de edificar, el municipio  nos hizo una oferta que costaba el doble de lo que nosotros podíamos pagar. Entonces, ofrecimos la mitad, y aceptaron, entonces la mano de obra corrió por parte de integrantes de la protectora. Nosotros necesitábamos un lugar donde contener a los animales con urgencia porque se nos estaban muriendo, se encontraban  en una situación de hacinamiento. Esta edificación quedó a  la mitad, solo es un rectángulo y quieren reducir la cantidad de caniles de diez, que era el proyecto original, a tres. Se inunda por completo al punto de no poder ingresar, fuimos a sacar unas máquinas que son de los miembros de la protectora que estaban trabajando en la construcción y nos cambiaron el candado y esas máquinas se perdieron porque quedaron bajo un techo que se rompió y nadie se hace responsable. 

¿Dónde están los animales rescatados hoy?
Los animales están en casas de los integrantes de la protectora, y de todos los que colaboran con nosotros. Hoy tenemos aproximadamente veinte animales. Tenemos catorce en el matadero, no es el mejor lugar para tenerlos eso lo sabemos, pero por lo menos comida no les falta, porque hay una señora que vive en Dolores, y los alimenta. 

¿Han tenido reuniones con el Intendente?
Sí, él nos había dicho que ya tenía a la empresa que iba a realizar el refugio a mediados de abril, pero estamos en agosto... También hemos hablado con él de la ordenanza que existe de “Tenencia Responsable” y se nos dicen que el Juez de Faltas tiene todo perfectamente estipulado, en la Ordenanza hay sanciones entre otras cosas, porque se refiere a la tenencia responsable como dice su título, pero la gente la desconoce, no sabe de qué se trata porque no se pone en práctica. 
Lo que tratamos de explicarle al intendente es que nosotros estamos luchando, no solo por los perros que están en la calle, sino que es una cuestión de salud pública y  lo hemos planteado varias veces. 

Nota completa en la edición impresa de Semanario El Espejo del martes 7 de Agosto de 2018